Las perspectivas para el calamar de Sudáfrica (Loligo Reynaudi) no se presentan alentadoras. Después del cierre de la pesquería entre los meses de abril y junio, las capturas de julio no han sido como se esperaban, manteniéndose la tendencia a la baja de las últimas temporadas.
Todo apunta a que el cambio en la temperatura del agua está afectando a la disponibilidad del recurso que ya suma tres años de bajas capturas, dejando lejos las 10.412 tm registradas en el 2010. La escasez en el suministro de loligo sudafricano también se ha visto reflejado en los datos de las exportaciones, de hecho las exportaciones a la UE pasaron de las 18.682 t en el 2012 a sólo 3.854 durante el 2013.
Ante esta escasez de suministro, los precios han aumentado más de un 60% en los últimos años y se prevé que mientras persistan las bajas capturas los precios continuarán al alza.